Los sonidos del agua.
Escudo de Nuévalos. |
Escudo de Zaragoza. |
Hacía años que había leído el libro de Paulo, Tere ya había lanzado alguna indirecta de ir a ver el parque natural del monasterio de piedra, el cansancio se acumulaba, ya teníamos descartado ir, pero solo hay 248 Km. desde Jaca y es una oportunidad única de conocer esa maravilla. La tarde anterior mientras paseábamos, sucedió lo inesperado, ese momento del que habla Paulo, el punto de mira de la escultura nos indicó el camino: río, agua, piedras y decidimos ir. Seguirnos hoy si queréis.
Salimos por la mañana, para ahorrar tiempo tomamos la autopista hasta Zaragoza el viaje se hizo descansado, pero de Zaragoza a Calatayud de lo mas aburrido que recuerdo.
A orillas del río Piedra me senté y lloré
"El instante mágico"
Es necesario correr riesgos. Sólo entendemos del todo el milagro de la vida cuando dejamos que suceda lo inesperado.
Todos los días Dios nos da, junto con el sol, un momento en el que es posible cambiar todo lo que nos hace infelices. Todos los días tratamos de fingir que no percibimos ese momento, que ese momento no existe, que hoy es igual que ayer y será igual que mañana.
Pero quien presta atención a su día, descubre el instante mágico.
Puede estar escondido en la hora en que metemos la llave en la puerta por la mañana, en el instante de silencio después del almuerzo, en las mil y una cosas que nos parecen iguales.
Ese momento existe: un momento en el que toda la fuerza de las estrellas pasa a través de nosotros y nos permite hacer milagros.
La felicidad es a veces una bendición, pero por lo general es una conquista. El instante mágico del día nos ayuda a cambiar, nos hace ir en busca de nuestros sueños. Vamos a sufrir, vamos a afrontar muchas desilusiones…., pero todo es pasajero, y no deja marcas. Y en el futuro podemos mirar hacia atrás con orgullo y fe.
Pobre del que tiene miedo de correr riesgos. Porque ése quizá no se decepcione nunca, ni tenga desilusiones, ni sufra como los que persiguen un sueño.
Pero al mirar atrás -porque siempre miramos hacia atrás- oirá que el corazón le dice:
“Qué hiciste con los milagros que Dios sembró en tus días? Qué hiciste con los talentos que tu Maestro te confió? Los enterraste en el fondo de una cueva, porque tenías miedo de perderlos.
Entonces, ésta es tu herencia: la certeza de que has desperdiciado tu vida”.
Pobre de quien escucha estas palabras. Porque entonces creerá en milagros, pero los instantes mágicos de su vida ya habrán pasado.
Paulo Coelho.
Las torres del Pilar a lo lejos ya conocemos la catedral, continuamos
hasta
Calatayud.
La Iglesia del Santo Sepulcro.
Paramos a estirar las piernas, dar un pequeño paseo y entramos en un bar restaurante de la plaza a refrescarnos, había un curioso ornamento en la pared.
Continuamos viaje el objetivo ya esta muy cerca,
llegamos a la población de
Nuévalos, junto al embalse de la Tranquera
llegando al monasterio, aparcamos, pagamos la entrada 15 euros por persona, mereció la pena.
Comenzamos el recorrido por el paraíso de aguas claras.
El Baño de Diana,
una primera vista de la Caprichosa.
La gruta del artista.
"No es el martillo el que deja perfectos los guijarros, sino el agua con su danza y su canción"
(Rabindranath Tagore).
Subimos para escuchar el agua.
en los Vadillos
y en los fresnos altos,
el silencio solo roto por ella.
Toca bajar como el agua
cada uno por distintos escalones,
aunque nosotros con mas calma hasta
los fresnos bajos.
Nos adentramos en Moria pero no encontramos ni orcos ni a Balrogs, estos abismos no son tétricos y lo único que cae con fuerza son raudales de poesía.
Descendiendo a manera de huida
humedad raudamente buscando
del encuentro el momento...
Espectaculares en su caída
generando sonidos y cantos
que inspiran mil melodías...
Pronunciadas pendientes
reflejando arcoiris
empapando versos
en cada uno de sus
cristalinos destellos...
Cayendo en saltos
que brincan al alma
mojando segmentos
nadando al fluido
que al final de la vía
de leve quietud su vida
inundará de humor líquido...
Dinámicas gotas de fiesta
celebrando trecho en vertiente
mientras la dirección al sur sea
en sumergidas corrientes
rociadas, infiltrando la... mente...
Del río naciendo tumultuoso trayecto
al río introduciendo
húmeda cascada...
al encuentro de su amada...
Cascadas de Rocío V-P.
En la gruta Iris una amalgama de sonidos y colores,
el calmado sonido del agua repicando y fuera, embravecida en la cascada.
seguimos contentos pese a que
olvidamos los chubasqueros,
llegamos secos a la cascada cola de caballo
De ahí nos dirigimos al lago del espejo,
hay que pasar la peña del diablo
Escondido en los muros
este jardín me brinda
sus ramas y sus aguas
de secreta delicia.
Qué silencio. ¿Es así
el mundo?... Cruz al cielo
desfilando paisajes,
risueño hacia lo lejos.
Tierra indolente. En vano
resplandece el destino.
Junto a las aguas quietas
sueño y pienso que vivo.
Mas el tiempo ya tasa
el poder de esta hora;
madura su medida,
escapa entre sus rosas.
Al salir del lago me quedé pensando, porque le llamarán del espejo.
Seguimos caminando hasta
la fuente del Señor y de ahí
a los chorraderos.
Un poco a la sombra
para seguir luego contemplando,
escuchando,
viendo pasar esos instantes mágicos
de luz
y color.
La cascada iris
la Trinidad.
A contra corriente llegamos
al mirador de
la Caprichosa
a la
Cascada sombría,
cambiamos la frescura del agua,
por la sombra de la piedra
y los árboles
Era ya tiempo de hacer un alto en el camino
cambiamos la frescura del agua,
por la sombra de la piedra
y los árboles
Era ya tiempo de hacer un alto en el camino
para reponer fuerzas, salimos a comer
que no solo de "agua" vive el "hambre".
Después de repostar fuimos a ver el vuelo de las aves rapaces
y disfrutar de las amenas explicaciones de los cetreros/as, ya van tres elementos hoy agua, tierra y aire.
decidimos visitar el monasterio
Las primeras noticias sobre el Monasterio de Piedra datan del año 1186, cuando los monjes de Poblet recibieron la donación del castillo de Piedra de manos del rey Alfonso II de Aragón. Fue dedicado a Santa María la Blanca y se catalogó como Monumento Nacional el 16 de febrero de 1983.
El lugar en el que se ubica el inmueble fue declarado como Sitio Histórico el 28 de diciembre de 1945. La iglesia, destruida en los primeros decenios de 1800, comunicaba con el claustro abierto de grandes arcos apuntados y sus capiteles con labrados follajes imitados del bizantino, así como con las distintas dependencias. También destaca la magnífica escalera principal que se despliega en dos anchos ramales sostenida toda por arcos y cobijada por una hermosa bóveda.
Refectorio en el se encuentra el tríptico Relicario de la Edad Media Hispánica, una joya Gótica-Mudéjar y una de las mejores obras de arte de Aragón. Este retablo se construyó en 1390 por orden del abad Martín Ponce para guardar en su interior la más importante de las reliquias que tuvo el Monasterio de Piedra, la Santa Duda de Cimballa, que era una Sagrada Forma que había sangrado para solventar las dudas que tenía un clérigo llamado mosén Tomás acerca de la transubstanciación del pan y el vino, en cuerpo y sangre de Cristo.
La cocina.
Un pequeño Tílburi (Deauville)
(Pan-European)
(Goldwing)
camino del museo del vino
patio y claustro
acceso a la sala capitular
galería del claustro
Fuimos hasta la Iglesia, destruida y sus imágenes mutiladas durante el tiempo que medió entre la revolución de 1835 y el año 1840, si a ello sumamos la desamortización de Mendizábal tenemos el resultado
RUINAS
Yo también tengo ruinas
y si acudo al pasado
ya no sé a quién o a quiénes
busco entre los escombros
son ruinas sin prestigio
sin guías y con musgo
inmensas y mezquinas
señas de lo que fui
columpios desnudeces
huellas crepusculares matutinas nocturnas
la luna las descubre
les dice lo que eran
columnas de tesón cúmulos de experiencia
pedernales de amor
catacumbas de miedo
yo también tengo ruinas
pero no deslumbradas
sino ciegas distantes
residuos de palabras
vestigios de rencores
esquirlas de castigos
reliquias de caricias
ruinas tan taciturnas
calimas de la pena
albergan sus fantasmas
como todas las ruinas
y como todas dejan
escuchar su lamento
yo también tengo ruinas
meses y años troceados
muñones de confianza
perdones en añicos
piedras en las que a veces
me reconozco entonces
amo la piel rugosa
de mis hermanas ruinas.
Se deslumbraron mis ruinas
Mario Benedetti.
Deslumbrados por la belleza y asombrados por la maldad, salimos del Monasterio de piedra con la certeza de que no habíamos desperdiciado ni un minuto de este día.
Al regresar
mas vistas y paisajes
con que llenar la saca
y el cuarto elemento (35º) nos acompañó por las Provincias
de Zaragoza y Huesca hasta el ocaso.
Al llegar a Jaca no podía acabar el día sin una buena cena acompañada de buen Somontano en casa Martín, ensalada especial, pato con frutos del bosque y una carne a la brasa, espectacular.
Si leyendo habéis llegado hasta aquí es que os arrastró el agua y su canción, sino no importa porque yo he disfrutado tanto recordándolo como allí, aún escucho su canto.
Vaya que si mereció la pena!! qué lugar!!
ResponderEliminarTodo lo mostrado en este viaje me ha encantado pero sin duda esto es el no va más.. Espero visitarlo algún día... Gracias por compartirlo.
Abrazotes.
Gracias, sabía yo que esta del agua te gustaría, a raudales y eso en pleno mes de agosto, como será la primavera, miedo me da.
EliminarMagnifico reportaje,gracias por ayudarme a recordar mi viaje a ese lugar incomparable, aya por el 72, es todo precioso, y como lo presentais en el blog,para aprender.Gracias una vez más por compartirlo.
ResponderEliminarUn abrazo.
alf
Gracias Alf, si te ha hecho recordar los buenos momentos me alegro, la verdad que fue un acierto ir, merece la pena darse un atracón de kilómetros para verlo y disfrutar de tanta maravilla. Saludos.
EliminarChapeau, caprichos de una naturaleza domada.
ResponderEliminarTílburi......
Saludos ya.
Gracias Cesar pero domada domada, por cierto obedece ya la Tílburi en las curvas o aún necesita látigo. Mus, digooo abrazos.
Eliminar