lunes, 27 de abril de 2015
sábado, 25 de abril de 2015
2014 04 25 Al Jerte.
Mira Jertedigo
Se termina la incursión por estas tierras, nos levantamos temprano, desayunamos, preparamos los arreos y emprendemos el regreso, por el asfalto creo, que con la lluvia y la niebla no se yo, al rato, entre piedras, paramos antes de llegar a la cascada de Caozo.
Cascada del Caozo Garganta Bonal.
“Aquí entre los castaños y robles que se elevan con gruesos de ocho varas y alturas de sesenta; por las gargantas hondas las aguas se despeñan, en resonantes arpas y en cristalinas trenzas”.
Nicanor Zuricaldy
Tras la dosis de calma continuamos hacia Garganta la Olla, o eso creo, porque en los letreros pone otras cosas con rima.
Subimos el puerto, cesa la lluvia,
dura poco la alegría, se cierra la niebla,
bajamos despacio, mojado, grava, niebla..... mala combinación.
Llegamos sin prisas a Garganta la Olla.
Mirador de la Serrana.
Estatua Obra de Evaristo García.
“Legua y media de Garganta, cinco leguas de Plasencia; habitaba una serrana alta rubia y sandunguera”
La Serrana de la Vera es un personaje del folklore local, que atraía hombres a su cueva para matarlos y guardar sus huesos.
Seguimos hasta el Monasterio de San Jerónimo de Yuste.
El claustro Nuevo es de finales del siglo XVI.
El claustro gótico es de finales del siglo XV.
La fundación del Monasterio de Yuste se remonta al mandato del obispo Pedro Hernández de Soria, entre 1.376 y 1.401, cuando los monjes ermitaños Pedro Brañes y Domingo Castellanos se retiraron a vivir a la ermita de San Cristóbal a las afueras de Plasencia, después se trasladaron a la ermita sede San Salvador de la Sierra y por último a Yuste.
Los anacoretas se integraron en la orden de San Jerónimo y con el apoyo del Infante Don Fernando que consiguió la bula papal en 1.408 para este efecto, se firma en 1.409 en Yuste la carta de fundación del monasterio.
El Monasterio de Yuste se compone de dos partes: el convento y la residencia del emperador. El convento cuenta con la iglesia, gótica del siglo XV, y dos claustros, es uno de los más conocidos de España gracias a su vinculación histórica con los últimos dos años de vida del emperador Carlos V (1.556-1.558).
Acceso a la cripta.
No se deben sacar fotos, parece ser que unos jeroglíficos que hay puestos en las paredes por todas partes significan eso, pero yo no entiendo de jeroglifología y por el "módico" precio de 9 € y media casilla en la declaración, pienso que están bien pagadas.
Entre puertas y ventanas
salimos a
la terraza de la casa palacio, realizada por Gaspar Hernández.
Fuente en la terraza, de los maestros Agustín de la Vega y Lope de Anturia.
Los jardines.
Rampa privada de acceso a los aposentos.
El estanque donde se entretenía el Emperador pescando tencas y truchas.
Escudo imperial tallado por fray Juan de Ávila, que mandó realizar Felipe II y busto de Pompeo Leoni.
"En esta Santa Casa de S. Hieronimo de Yuste se retiro a acavar su vida el q. toda la gasto en defensa de la fe y la conservación de la justicia Carlos Quinto Emperador Rey de las Españas, cristianissimo invictisimo. Murió a 21 de setiembre de 1.558".
Desde la cama podía ver el altar mayor.
Que cruz.......
Salimos por la Iglesia
mas pelados que el eucalipto.
Continuamos hasta Jarandilla de la Vera.
Escudo de Jarandilla
Castillo Palacio de los Condes de Oropesa del siglo XV,
Refrescamos, compramos y seguimos.
Valverde de la Vera, castillo e Iglesia de Nuestra Señora de las Fuentes Claras.
Pasamos Candeleda
Cruzamos el río Arbillas.
Llegamos a Arenas de San Pedro,
Puente medieval de Aquelcabos donde se cobraba pontazgo.
Castillo de la triste Condesa conocido como Castillo de Don Álvaro de Luna o Castillo del Condestable Dávalos, fue construido por orden del Condestable Rui López Dávalos a finales del siglo XIV y comienzos del siglo XV.
Álvaro de Luna, después de prestar grandes servicios a la corte, fue ejecutado por orden del Rey Juan II. Su dolida esposa se retiro al castillo de Arenas y se encerró en el de por vida a llorar la muerte de su amado.
"Yo la Triste Condesa Doña Juana Pimentel Señora de Montalbán, por cuanto a toda persona, según su estado, es convenible cosa de facer gracias, dádivas e limosnas a las iglesias e monasterios e órdenes e ermitas e otras personas e otros lugares piadosos, porque el servicio de Nuestro Señor Dios e de Nuestra Señora la Virgen María e las tales casas e lugares sea aumentado e non venga en detrimento por defectos de bienes temporales necesarios al mantenimiento corporal de aquellos ministros servidores de tales iglesias e monasterios e porque yo he mucha devoción en Nuestra Señora la Virgen Santa María del Pilar (Agustinos) que es cerca de la mi Villa de Arenas e porque dicho monasterio e prior e frailes e convento dél, tengan cargo de rogar a Dios e a la dicha nuestra Señora la Virgen Santa María en sus sacrificios e oraciones por la ánima del Maestre mi señor, por Dios haya e por la vida mía el del Conde Don Juan e Doña María mis fijos, después de nuestros días... hágoles en las rentas de mi villa de Arenas la donación de seis mil maravedís. LA TRISTE CONDESA" .
Llegamos a Mombeltrán.
El Castillo de Mombeltrán, también conocido como el Castillo de los Duques de Alburquerque erigido por Beltrán de la Cueva, primer duque de Alburquerque en el siglo XV.
Empezamos la subida del puerto del Pico,
con unas gotas y de nuevo niebla
Todo lo que sube baja, dicen.
Pasamos sin parar por Ávila,
hummm ñamñam, ternera, cochinillo, hummm, deliciosos frutos de la huerta,
aunque unos llevan la fama..., en Arévalo está de muerte también.
Escudo de Arévalo.. |
Llegamos a la Ciudad,
o lo que queda de ella.
Iglesia de San Martín
aparcamos y a recorrerla.
La ciudad de Arévalo a la Reina Isabel la Católica en el V centenario de su muerte 1.451 - 1.504, obra del escultor Francisco Aparicio.
"Coño era facha".
Arco de Alcocer o de la Cárcel, una bella puerta mudéjar, era la entrada principal a la ciudad amurallada, del siglo XIII, uno de los restos de la muralla original.
Lo atravesamos y salimos
a la Plaza Real.
Escultura a Eulogio Florentino Sanz, poeta nacido en la ciudad de Juan de Avalos.
Escultura a Emilio Romero Gómez, del mismo autor que la anterior.
Iglesia de El Salvador, románico-mudéjar reconstruida en el s. XVI.
Iglesia de Santo Domingo de Silos, donde reposan los restos de san Vitorino, patrón de Arévalo.
Iglesia de San Juan Bautista, también de origen románico -mudéjar del s. XII.
Palacio de Valdeáguila también conocido como Torre del Marqués de Villasante, construido en el siglo XVI por los Marqueses de Villasante y Condes de Águila.
El palacio de Sedeño o Palacio del Marqués de los Altares del siglo XV,
con restos de un precioso esgrafiado y un bello friso mudéjar, fue habitado por Germana de Foix, segunda esposa de Fernando el Católico.
El Color de los ojos
Corazón que, en tiernos años,
por unos ojos te pierdes;
para entender sus amaños,
no mires sin son castaños,
negros, azules o verdes,
que todos los colores
por la expresión iguales,
reflejan los amores;
sin que distingas en sus cristales
a los leales
de los traidores.
Ojos que miran amando,
miran siempre convenciendo;
y, aunque apagarlo simulen,
siempre el amor salta dentro.
Y ni son los matices ni los colores
lo que a los ojos hace tan bellos;
sino el rayo de amores
que luce en ellos.
“Dame tu amor... o me mato!”
dicen unos ojos negros;
y dicen unos azules:
Dame tu amor... o me muero!”
Y aunque apagarlo simulen,
siempre el amor salta dentro;
y ojos que miran amando,
miran siempre convenciendo.
Y todos sus colores,
por la expresión iguales,
reflejan los amores;
sin que distingas en sus cristales
a los leales
de los traidores.
Eulogio Florentino Sanz
Caminamos hacia Santa María la Mayor y su torre mudéjar.
Accedemos a la plaza de la Villa
constituye un espléndido conjunto de casas de entramado con relleno de ladrillo
y fachadas que se configuran en forma de soportal,
fue centro neurálgico de la población en época medieval.
Casa de los Sexmos, actual sede del Museo de Historia de Arévalo. Esta casa fue testigo de la ratificación, en julio del año 1494, del Tratado de Tordesillas, por parte de los Reyes Católicos, en virtud del cual se establecía un reparto de las zonas conquistadas del nuevo mundo con Portugal.
La plaza de la Villa fue declarada Monumento Nacional en el año 1.931,
ejemplo de arquitectura popular castellana de la época medieval.
Iglesia de San Martín,
románico -mudéjar del s. XII, la más antigua de la ciudad.
Santa María la Mayor románico-mudéjar del s. XIII.
Con arco tras arco
salimos de la plaza,
con resaca de beber tantos monumentos.
Árbol genioilógico.
Castillo de Arévalo su origen se remonta al siglo XIV con reformas en el siglo XV y XVI.
Fue mandado reconstruir a mediados del siglo XV, al más puro estilo mudéjar, por Don Alvaro de Zúñiga. Tras su muerte pasó a manos de los Reyes Católicos.
A comienzos del s. XVI, Fernando el Católico, consciente de la situación estratégica de Arévalo, lo remodela, convirtiéndolo entonces en fortaleza artillera.
Sirvio de residencia a personajes como Isabel la Católica, Felipe II, Beatriz de Portugal.
Prisioneros ilustres entre sus muros fueron: Blanca de Borbón, tras su boda con Pedro I el Cruel, y el príncipe de Orange, Guillermo de Nassau.
Después de dar un paseo por los alrededores del castillo, recogemos las monturas y salimos de la ciudad por
el Puente de Medina del s. XIV, sobre el río Arevalillo,
y continuamos rodando hacia la tormenta,
paramos a repostar, ya de noche y tras tomar algo nos despedimos, para dirigirnos a nuestras casas. Nos cayó una gran tromba de agua en esos últimos kilómetros, como queriendo borrar los recuerdos y las imágenes de esos días inolvidables entre amigos, que Cesar nos brindó con la organización del viaje, gracias.
Por la mañana temprano, salimos con Alejandra y Dani camino de Gijón por el puerto de Pajares,
donde todavía quedan restos de la tormenta del día anterior.
Y esta es la última hoja del relato de un viaje al Jerte, de seis pasajeros de este tren de la vida, que van siempre con las sacas llenas.
La última hoja. En un álbum
Hoja, de tantas en pos,
dad a un triste que os escoja;
y comprenderán por vos
que es triste como un adiós
la última hoja.
¡Ay! Cuando al chopo aterido
rudo el aquilón despoja
con monótono ruido,
siempre le arranca un gemido
la última hoja.
Pobre de gala y encanto,
tal vez un libro se arroja;
tal vez interesa tanto,
que se humedece de llanto
la última hoja.
Eulogio Florentino Sanz
Saludos.
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