domingo, 18 de octubre de 2015

2015 10 18 Covadonga

Sin palabras.



Hoy toca ir a un sitio al que vas cientos de veces y parece que nunca has estado, al que cuantas mas veces vas, mas ganas tienes de volver, un sitio especial, un sitio lleno de energía, donde te recargas de ella,  en donde cada estación del año te quedas sin palabras. Un sitio tan real que es el Real Sitio de Covadonga.
Dani y Alejandra nos preparan una buena ruta a la que junto a Slow, Ignacio y Miguel, nos enganchamos Teri, Dana, y el que relata.
En eso de dar la lata estaba mientras tomábamos el café y de repente nos encontramos subiendo a los lagos,
pronto, atrás, queda el lago Enol.
Que si, que te estoy escuchando hombre.
Vemos de cerca el lago de la Ercina,
y lejano mientras subimos,
como lejanas las palabras.
Palabras rotas, ahogadas en cada respiración,
palabras mudas, palabras muertas.
Palabras gastadas en oídos que no escuchan, oídos necios.
Palabras quietas, palabras tiernas,
palabras desnudas, directas y sinceras.
Palabras simples o complejas.
Palabras que no expresan, silencios elocuentes,
palabras que faltan para describir tanta belleza.
Palabras que no riman, palabras que son poema.

Otoñal
En cascada de copos amarillos
la vida se refugia en su morada,
los ocres invadieron su enramada…
llamáronse a silencio viejos grillos.
Acalla la quietud mil estribillos
de canciones, de himnos y tonadas;
opaca opalescencia despiadada
donde van a morir todos los brillos.
Bullicios han de ser mis compañías
en los sones de música del alma…
Aturdirme, deseo, de alegrías.
Que haya voces de nuevas alboradas.
Escudado en visión de lejanías:
¡Sé que es mío el silencio que me aguarda!
Omar José Abatedaga
Callados vamos bajando, para no despertar silencios,
sembrando palabras con cada mirada.
¿Me escuchas?
Recogimos nuestras motos,
en una melodía de curvas y paisajes otoñales,


fuimos descendiendo hacia el Santuario.


Covadonga
Desde el alto peñón baja el torrente
Y ora es manto de espuma en el vacío,
Ora un collar que se nos fue en rocío,
Ora epopeya de tambor batiente.
Llega hasta abajo, se transforma en fuente;
Va más abajo, se transforma en un río;
Más abajo, un clamor, un vocerío
De alguien que lucha con extraña gente.
Voz que en el viento su vigor prolonga,
De pastor en pastor, de braña en braña,
Ruge en Onís y repercuta en Ponga.
¡Es la voz de Pelayo en la montaña,
Que empieza resonando en Covadonga
Y acaba resonando en toda España!
Alfonso Camín

Después de disfrutar de un gran día con los amigos, 
regresamos a casa sin palabras y con la saca llena de espacios, espacios que hay que llenar día a día, porque se nos escapa el tiempo entre los dedos de las manos.


Saludos.



6 comentarios:

  1. Gratos recuerdos de la zona , Covadonga, Cangas , Arriondas, precioso reportaje entañable diría. Gracias!! por compartir y que no decaiga.
    Bicos a Teri Un abrazo.

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    1. Gracias Alfredo, vamos con retraso pero retomando. Abrazos.

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  2. Covadonga es como bien dices siempre diferente y siempre un acierto como lo son tus palabras. A buen entendedor...
    Abrazotes.

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    1. Gracias, tu es que ves mas allá que simples palabras, carambolas a tres bandas. Saludos.

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  3. Tiempo hace que no subo,la vespona tiene que ir a por su lazo......me estáis poniendo una de tareas que no voy a dar ato.
    Abarazos.

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    1. Con el deshielo te coges la saca y empiezas con la llena y acabas con la nueva, tu puedes que lo se yo, Abrazos.

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