Depredadores señalados.
Las condiciones climatológicas de este mes nos permiten practicar nuestra aficción, que a veces complementamos con visitas a esos centros del conocimiento que hay en nuestra Provincia. Así que después de comer caliente, nos acercamos junto con Alejandra, Dani y Slow hasta el centro de interpretación la Casa del Lobo, en Belmonte.
Se encuentra en las antiguas escuelas de la ciudad.
Además del centro de interpretación hay un paseo guiado hasta un cercado, donde se encuentran ejemplares de lobo ibérico.
Pillamos al lobo despistado, y entre aullidos, entramos en el centro.
Tras las explicaciones del personal, empezamos a curiosear. Panel informativo con la distribución mundial del lobo,
distribución del lobo Ibérico en la Península,
adaptación al medio y su hábitat.
Trampas,
medios de protección para los perros pastores,
como las carlancas.
Huella de lobo.
Cráneo de lobo ibérico (Canis lupus signatus).
Aprendimos que la potencia de la mordedura del lobo, es de 184,16 Kgf ,
nada comparable con la del enano de puyol (en minúsculas) y los suyos, menos mal que no saben que corega aumenta la fuerza de la mordida, sino, este y otros grandes depredadores, no hubieran dejado de este País ni los huesos.
Cráneo de perro mastín (Canis lupus familiaris).
Este aunque muerda lo hace para proteger lo suyo, o de su dueño.
Cráneo de zorro (Vulpes vulpes).
Los lobos pueden alcanzar velocidades de entre 40 a 50, una velocidad punta de 65 y una sostenida constante e infatigable de 13 Km./h.
Nobleza del fuerte
La noche sobre el bosque descendía
cuando un hambriento lobo carnicero,
encontrando a un viandante en un sendero,
quiso saciar el hambre que sentía.
Le atacó con astucia y cobardía,
por la espalda a traición saltando fiero,
y fin hubiese dado del viaje
que en vano con ardor se defendía.
Pero surgió un león de la espesura,
que al lobo hizo escapar con un rugido,
y acercándose al hombre sin ventura
la sangre le lamió del cuello herido...
¡Mas, ay... la halló tan dulce y tan caliente,
que acabó devorando al inocente!
La fiera dentellada.
Está el hombre en la vida prisionero,
en un mundo de fiera dentellada,
entre gente que vive disfrazada,
siendo lobo, con pieles de cordero.
El mundo es un enjambre. Un avispero
de buitres que preparan la jugada,
y te engañan de forma despiadada,
en busca del poder y del dinero.
Y en esta sociedad, el hombre honrado,
amante de la paz y la armonía,
se encuentra tristemente acorralado,
teniendo que enfrentarse cada día,
ecuánime, cabal, justo y sincero,
con los lobos que visten de cordero.
Alfonso Cabello Jiménez.
Un poco de mitología y salimos del centro sabiendo diferenciar quien es el auténtico depredador.
A la hora que marca el reloj regresamos a nuestras casas, con las sacas llenas, y sabiendo que todos somos piel de cordero en este mundo de depredadores, hasta que algún día aflore el lobo que llevamos dentro.
Saludos.